7 julio, 2017 Patricia da Costa

¿Qué es una Doula y cómo te pueda ayudar durante el embarazo, parto y post parto?

Las doulas somos mujeres que acompañamos a otras mujeres en su camino a la maternidad. Nuestra principal tarea es dar acompañamiento y apoyo, tanto físico como emocional, durante el embarazo, el parto y el puerperio. El objetivo de una doula es ayudar a la pareja y especialmente a la madre a experimentar un parto positivo y ser participes en hacer todo lo posible para tener el parto que desean tener.

Las mujeres no hace muchos años atrás tenían a sus hijos en su casa y en compañía de su familia; madre, hermanas, tías… que las ayudaban en el trabajo del parto y los cuidados del bebé. Esas mujeres no estaban especialmente instruidas ni entrenadas, pero contaban con su experiencia, su afecto y apoyo. Hoy en día gran cantidad de mujeres se enfrentan a la maternidad solas y sin referentes cercanos, tenemos acceso a información abundante pero nos podemos encontrar sin rumbo o abrumadas por leer tanto en internet y no tener un apoyo concreto y comprensión

¿Cómo es el acompañamiento de una Doula?

Muchas veces tenemos temores, sentimientos contradictorios frente al embarazo; la alegría del embarazo lleva asociada sentimientos de temor, de inseguridad, frustraciones por partos que no resultaron ser como esperábamos, decisiones que no tomamos o temas que simplemente no se nos ocurrió preguntar, pensar y prever.

Te acompañamos comprendiendo tus necesidades físicas y emocionales en cualquier situación que rodea el nacimiento, adaptándonos a tu caso y siempre desde una actitud de respeto y escucha.

La primera misión de la doula es informar positivamente de la experiencia de la maternidad y del parto a las mujeres embarazadas. El fundamento del cuidado de una doula se basa en el conocimiento de que el continuo soporte emocional y la confianza durante el proceso de parto mejoran y facilitan todas las fases de la maternidad en gran medida.

Tareas que puede realizar una doula:

  • Durante el embarazo:
    • Comenta tus objetivos para el parto así como cualquier duda y temor
    • Complementa la información recibida en las clases de preparación al parto
    • Informa sobre el proceso del parto y el dolor y sugiere ideas para mejorar el confort adecuadas a las circunstancias
    • Provee de consejo sobre un plan de parto a consultar con el médico
  • Durante el parto
    • Te acompaña cuando sientes la necesidad de su apoyo, ofreciéndote soporte emocional
    • Está contigo para responder tus dudas y animarte
    • Sugiere maneras para soportar el dolor y facilitar el parto en colaboración con los médicos
    • Actúa como un vigilante de los deseos de la madre durante el proceso del parto frente a intervenciones no deseadas
    • Ayuda creando un entorno adecuado para la madre (reduciendo el nivel de ruido y luz, poniendo música, regulando el frío o calor, respondiendo al teléfono, etc.)
    • Colabora con la partera en la atención de un parto en casa
    • Respeta la privacidad de la mujer de parto
    • Da apoyo y seguridad a otros miembros de la familia
  • Después del nacimiento del bebé
    • Ayuda a través de los procedimientos del posparto
    • Facilita el establecimiento temprano de la lactancia materna

Pero en realidad, ¿qué cambia con una doula? Según el libro “Mimando a la madre, cómo una doula puede ayudarte a tener un nacimiento más corto, fácil y sano” de Kennel, Klaus y Kennel (Mothering the Mother, How a Doula Can Help You Have a Shorter, Easier and Healthier Birth (1993)) una doula puede proporcionar las siguientes diferencias:

  • 50% reducción en cesáreas
  • 25% parto más corto
  • 60% menos peticiones de epidural
  • 40% menos uso de oxitocina sintética
  • 30% menos uso de analgésicos
  • 40% menos uso de fórceps
  • Mejora el vínculo padres-bebé
  • Menos problemas con la lactancia
  • Menor incidencia de depresión posparto

Un estudio de la universidad Case Western Reserve en Cleveland, Estados Unidos, mostró que mientras el 63% de las mujeres que no tuvieron el apoyo de una doula necesitaron de una cesárea tras la inducción del parto, sólo un 20% de aquellas que tuvieron a una doula con ellas la requirieron.

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